Esta historia empezó hace mucho, mucho tiempo, en aquellos nuestros maravillosos veintitantos. Pero que no les confunda el comienzo, no fue un cuento de hadas, ni de Princes y princesas. Aunque este final, que con tanta ilusión hemos preparado, sí podría parecerse más al de un cuento.
Como un libro nuestra historia tiene una introducción y un desenlace (enlace 😉) faltaría el nudo.
El nudo ha sido llevar a cabo todos los preparativos para este día, superando obstáculos , llorando importantes “hasta pronto” y derrotando monstruos, ayudados eso sí, por médicos, muletas, familia, amigos, perros y gatos.
Ahora nuestro deseo es que disfrutéis de este final con nosotros “… y fueron felices y comieron perdices”
Os esperamos